CONTAMINACION MUSICAL:

Hace referencia a la abundancia de música difundida en los espacios urbanos y el culto a su amplificación. Independientemente del volumen, una música no agradable, en cuanto no solicitada, y sobre todo cuando se presenta de forma reiterada y obsesiva, puede "contaminar" en los mismos términos en los cuales la contaminación acústica, puede representar un "peligro para la salud humana" ya que interfiere "con las legítimas fruiciones de los diversos ambientes".
El aspecto cualitativo incide en la alteración de los hábitos de escucha del hombre, conduce a un efecto de saturación y modifica la escucha a través de una indistinta experiencia sensorial. En particular, la invasión de la música difusa en el ambiente impide el silencio concebido como momento de reposo, de reflexión; sin duda un derecho subjetivo inalienable, pero también hábitat propicio a la buena música, a la atenta escucha.


De acuerdo a informaciones recientes, las sociedades de nuestro tiempo son productoras, de sonidos y ruidos que tienen una variedad, intensidad y perdurabilidad, que constituyen una forma de contaminación física por sus efectos: la contaminación acústica.El ruido incide en el oído, órgano de percepción fisiológico; la interpretación de lo que se oye es el resultado de la forma en que el sistema nervioso central procesa el estímulo sonoro que recibe.El ruido no modifica el medio ambiente, interviene en actividades del desarrollo social del individuo, interfiriendo en la comunicación, en el aprendizaje, en la concentración, en el descanso y distorsiona la información. Es el efecto producido en el órgano de la audición del ser humano por las vibraciones del aires, los ruidos carecen de armonía.En 1964 en la Argentina se organizó el primer Consejo de Abolición del Ruido donde la nueva ordenanza municipal anti-ruido distingue entre ruido “innecesario” y “excesivo”. Desde la aplicación de la ley anti-ruido se han clasificado como ruidos innecesarios todos los sistemas de llamamiento público que puedan ser oídos fuera de locales cerrados, inclusive la música, la publicidad y los discursos.Buenos Aires figura entre las ciudades más ruidosas, junto con Tokio, Roma y New York. Si en nuestra Reserva ecológica, el ruido invadiera, es probable que provocaría posibles migraciones de las aves del lugar.El consejo Deliberante dictó en 1983 un código fijando límites del ruido (más de 80 decibeles. No se cumple. Los barrios más ruidosos son Recoleta, Palermo Viejo, Almagro y Retiro. Los más serenos: Versalles, Villa Pueyrredon y Villa Devoto.Según un estudio realizado para el Plan Urbano Ambiental por el Centro de Estudios Avanzados de la Universidad de Bs. As., La ciudad es cada vez más ruidosa.Los adolescentes de nuestra sociedad padecen los efectos nocivos de orden psico-fisiológico sobre su salud desde el hogar, la escuela, el barrio, los centros de entretenimiento, los locales bailables cerrados donde la contaminación sonora es tal que comienzan a manifestarse fatigas auditivas....las civilizaciones en desarrollo crearán más ruido, menos, no... El ruido no sólo aumentará en los centros urbanos sino también con el incremento de la población... dentro de un siglo, cuando alguien desee huir a un sitio silencioso podrá no haber lugar adonde ir...Cuando una persona está expuesta a una cierta intensidad de ruido, se producen modificaciones en la circulación de la sangre y en el funcionamiento del corazón. En una conversación en voz alta son suficientes para afectar el sistema nervioso y provocar con ello contracciones en gran parte del sistema circulatorioMURRAY SCHAFER, especialista mundial en el campo de la música y el sonido, compositor, educador y pionero en la ecología acústica, en su libro “Una educación Sonora” dice: ... “el paisaje sonoro cambiante ha estimulado un mayor apetito por el ruido; acostumbrados a un nivel sonoro creciente en los ambientes de trabajo y en las calles hemos llegado a necesitar niveles más elevados de volumen sonoro en la vida doméstica y durante el entretenimiento. Ignorando los peligros que esto supone para la salud, el ciudadano moderno podría oponerse a que se reduzca el ruido en el mundo, porque siente que con eso perdería parte de la vitalidad de su existencia. Y esto es verdadero a nivel de la juventud como lo demuestran los crecientes niveles de la música popular”...J. S. Bach fue un hombre sensitivo, prefería el sonido dulce y tenue de un clavicordio al sonido del órgano.En la historia de la Música, a partir del siglo XIX, se buscaron instrumentos más potentes, los famosos Stradivarius fueron reforzados, el piano reemplazó al clave. La guitarra eléctrica y el micrófono han venido a reemplazar los sonidos “naturales”. Se buscan amplificadores. La presión del sonido sobre los tímpanos produce un dolor que puede llevar a sangrar los oídos con la inminente sordera.Los compositores siempre buscaron conmocionar a la audiencia, Ej. Beethoven, Beriloz, Strawinsky y Stockhausen.La música se torna cada vez más sonora. El ruido aumentará en los centros urbanos y con el incremento de la población y la proliferación de las máquinas invadirá los pocos reductos de silencio que quedan en el mundo.De acuerdo a investigaciones consultadas, se puede observar que la gente que ha recibido más educación ( científicos, investigadores, artistas y miembros de profesiones liberales) son más susceptibles al ruido del tránsito que la gente que ha recibido menos educación.En Francia se prohíbe el funcionamiento de radios a transistores en el transporte ferroviario, en los ómnibus y subterráneos como en las calles y lugares públicos (parques, playas, restaurantes etc.. En Moscú fue declarado ilegal el uso de bocinas de automotores.Ante este panorama , se decidió abordar esta problemática- desde la cátedra de Cultura Musical- a través de compromisos de acción con el alumnado, tales como exploración individual del ambiento sonoro hogareño, lugares de diversión, viajes en distintos medios de transporte, salas de videos-juegos, con registro sonoro en casette para compartir y escuchar en el aula. También se efectuaron recorridos grupales por sectores de la escuela para realizar estos registros, salida a recorrer las inmediaciones del predio de la escuela, lectura y debates áulicos sobre este tema.Llegaron a la toma de conciencia, y se abordaron conclusiones que denotan un interés por cambiar las circunstancias en la que viven.Estuvieron comprometidos con esta propuesta y expresaron en trabajos de investigación de campo con evaluaciones de la situación y con el fin de socializar esta experiencia, se expresaron en colages que fueron expuestos a la comunidad escolar, junto a reflexiones resultantes de esta experiencia con el fin de democratizarlas para ampliar el conocimiento de la contaminación sonora en nuestros días.